sábado, 16 de agosto de 2014

5 Clasicos 5 Impresiones. 203-404-504 Cabrio, 205 GTI y 205 Gutmann.


En la entrada Los 50 Peugeot de Daniele Belucci se habla sobre su pequeño museo, en las fotografías, ademas de las de los vehículos expuestos se ven algunas de un pequeño recorrido por las rutas de Brianza de cinco de sus vehículos: un 203, un 404, un 504 Cabriolet y dos 205 GTI, uno de serie y un impresionante Gutmann  16v 160HP (Derivación 309).

Ahora la gente de MotoriOnline, fuente de aquella nota, nos cuenta las impresiones de manejo de esos 5 ejemplares.


Peugeot 203.
Presentado en el 48, justo después de la guerra, con una clara inspiración en los coches americanos, pero pequeño, ya que estaba destinado al mercado europeo. Fue el primer Peugeot con carrocería  monocasco, altamente innovador en ese entonces, pesado y robusto, se produjeron durante 12 años más de 700 mil unidades. El tablero de instrumentos es aún muy decó, esta unidad, como la gran mayoría cuenta con techo solar (Solo va versión mas económica no lo traía) . Aparte de algunas costumbres del pasado, como la secuencia de arranque, que requiere varios pasos, a diferencia de los coches modernos donde basta con girar la llave,  la conducción es muy agil y resulta más actual y versatil de lo que uno imagina. El motor, un motor de 4 cilindros de 1300cc posee un muy buen torque, tapa de cilindros de aluminio con cámaras de combustión hemisféricas y válvulas a la cabeza. La caja de cambios de 4 velocidades manual con comando al volante, tiene la cuarta marcha sobremultiplicada para reducir el consumo de combustible. Con las puertas delanteras de apertura hacia atras y una estética encantadora, que me dan ganas de comprar uno para hacer excursiones en el tiempo libre. Su valor es contenido, se habla de precios entre 5 mil y 10 mil euros, dependiendo de la condición y el año, y este ejemplar ha hecho este año el viaje de regreso rodando desde Southampton (Inglaterra) donde fué adquirido hasta Milán (Italia), sin el mínimo problema!

Peugeot 404
El 404 nos mueve a la siguiente década, mas moderno, sus líneas se deben a Pininfarina, y es notable cierto parecido con algunos Lancia y BLMC de la misma época diseñados por el mismo. Parantes delgados, gran visibilidad, posición de conducción alta, un motor de 4 cilindros de 1600 fué el auto de la burguesía francesa. La suspensión es suave y apueta a la comodidad, un requisito dictado por las carreteras francesas de la época, llena de caminos de asfalto mediocre y de tierra. También en este caso la 4ta es muy larga, hablamos de un coche capaz de más de 140 km / h. . Este ejemplar fue donado hace poco tiempo por Piersandro Berti, ingeniero naval di Pietrasanta (Lucca) . Quién lo había adquirido a mediados de los años 80 a una viuda boloñesa que durante diez años lo tubo parado en su garaje. Durante 10 años fue utilizado como un coche todos los días y luego, después de haber sido restaurado, está en estupandas condiciones, y muy pocos kilómetros.


Peugeot 504 Cabriolet
Un elegante cabriolet Peugeot 504 de los años '70. Su conducción es decididamente más moderna, básicamente se trata de un coche casi actual con palanca de cambios manual clásica en la posición convencional, un logro, después de dos cambios en el volante! Vamos a explayarnos mejor sobre este coche, gracias a una prueba completa en carretera, pero podemos adelantar algunas características e impresiones. Era un 50% más caro que la versión coupé, está equipado con inyección mecánica de combustible, frenos a disco y suspensiones independientes en las 4 ruedas y caja de 4 velocidades. En el período conocido como  "los años de plomo", en europa, en contraste con la crisis Peugeot lanzó este cabriolet de lujo, tal vez uno de los más bellos y elegantes de la historia. Era un coche de paseo, con un motor fiable y potente, con su poco más de 100 HP cuando algunos competidores deportivos tenían incluso 130, pero el 504 Cabriolet puede jactarse de un mayor torque a bajas rpm, una suspensión suave y cómodas plazas, un gran baul y un  silencio omnipresente.


Peugeot 205 GTI 1.9
El 205 1.9 Gti nos lleva a los años 80. Es un 'auto importante para la marca, representa un punto de inflexión, la conversión de Peugeot, que en los años 70 se había convertido en un líder del mercado diesel, y ahora hay un retorno de la atención a sus versiones nafteras y también deportivas, el Gti, ha sido fundamental para esto. También en la década anterior se habían hecho importantes esfuerzos financieros para salvar Citroën creando el Grupo PSA en 1974 y sólo el éxito de ventas de vehículos diésel había financiado esta operación. En los años 80 quiso lanzar algo orientado a los jóvenes y, por primera para Peugeot, para las mujeres. también se adoptó el concepto de productividad de los japoneses Just in Time para volver a la competitividad. Si los modelos de cabriolet representaron un éxito en el público femenino, el Gti y sus éxitos en las competiciones de la mano de Jean Todt, la convirtieron en un modelo deportivo de los más carismáticos de todos los tiempos. 5,5 millones de 205 fueron vendidos. El Gti nació en 1983, con motor de 1600, primero con 105 y luego 115 HP. El 1,9 se nació en 1986, con 130 HP, un auto reactivo y de conducción exigente, extremo para la época, pero con bajo consumo de combustible gracias a la adopción de la inyección electrónica de combustible Bosch L2 Jetronic. Hemos probado un ejemplar, con amortiguadores KONI, escape Supersprint y neumáticos deportivos Pirelli, que es muy divertido y eficiente, en comparación con los deportivos de hoy en día, aporta un espíritu muy salvaje.


Peugeot 205 GTI Gutmann.
El ex piloto alemán Kurt Gutmann, propietario de un concesionario de Peugeot en Breisach, a 40 km de la frontera francesa, se convirtió en un preparador muy conocido y con el debut del 205 Gti 1.9 en 1986, decidió crear una versión aún más extrema, con altura rebajada en 30 mm y cambios cosméticos, incluso en el interior, pero sobre todo "trasplantarle" la tapa de cilindros de 16 válvulas del Peugeot 309 S16, el resultado es un "monstruo" de 160 HP. En Italia se vendieron 20, no hace falta decir que hoy es un muy, muy difícil de encontrar. Conducirlo es una experiencia llena de emociones, 950 kg y 220 km / h, un agarre mas eectivo con su despeje reducido y un sonido aún mas endemoniado que el Gti probado previamente. También siente la diferente la distribución, y la entrega de potencia a altas rpm muy superior lo vuelve más agresivo. Esta unidad tiene su historia, hace mucho tiempo, un hombre joven en la provincia de Biella, después de haber destruido en un accidente un  205 Gti "estándar" , decidió ir por mas y lo compró en 1989 a un importador de Lana (Bolzano, Suiza) Finalmente el Gutmann después de 10 años y 99.000 km recorridos  acabó en un concesionario Peugeot de Treviso, pasando a formar parte de su colección de más de diez 205 GTI.

Con cual nos quedamos?
Los amantes de los coches clásicos afirman que para disfrutar de ellos hay que dedicarse a un solo vehículo, también suscribo a esta idea. La elección es una necesidad y luego, si tuviéramos que dar algunas sugerencias para la compra, podemos decir que el Cabriolet 504, es bello, relevante y fácil de manejar, salvo por la ausencia de aire acondicionado. Podría reemplazar a un auto en cualquier viaje sin imponer grandes sacrificios. El 205 GTI ya es más moderno, evoca recuerdos importantes de una generación que ha vivido en los '80, cuando fue uno de los más deseados y buscados pequeños deportivos, y es capaz de entretener aún ahora, incluso más que sus equivalentes de hoy con muchos caballos, pero sin el carácter que el 205 tiene en abundancia. Ufff, el Gutmann!!!, aunque sea difícil de encontrar, es una joya digna de nota. Sin embargo, si usted quiere disfrutar de los autos antiguos en un 100%, con algo verdaderamente histórico y soluciones de otros tiempos, pero sin llegar a los precios estratosféricos de coches complicados, el 203 es algo fantástico, tan fácil de conducir, una vez que usted se habitúa  se siente cómodo como un guante, y la gente da vuelta a mirarlo más que si estuviera al volante de un Ferrari. Después de conducir nos hizo querer tener uno.

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